LA BODA

Hoy empiezo a escribir este diario y ya tengo que despedirme. Dentro de un par de horas empiezo un viaje de 10 horas que me llevara a un pequeño pueblo en la provincia de Cáceres. Es la boda de mi prima Eva.

Otra vez tocara aguantar a los familiares plastas que preguntan: “Y donde has dejado al novio?”. Con 24 años que tengo y ningún novio conocido, yo creo que deberían empezar a sospechar.

Supongo que no me daría tanto palo ir a la boda si no fuese por los 3 días y medio que estaré sin ver a mi niña. Es que como ya decíamos ayer, nos hemos mal acostumbrado, el mes de agosto lo hemos pasado juntas, excepto algún día que iba ella a dormir a su casa. Si es que parece que vivamos juntas, somos como un matrimonio (jejeje) y eso que solo llevamos saliendo un mes (oficialmente).

Ais… seguiría escribiendo, pero tengo que hacer la comida y todavía no me he preparado la ropa (soy lo peor).