4º DIA: O COMO SI LLEVASE 15

Estoy haciendo todo lo posible por mantenerme ocupada como sea… ayer cumplí con mis obligaciones familiares y fui a visitar a mis tíos (los de Navarra y los de Toledo) que estaban de visita por Sitges.

No es que me resulte un esfuerzo tan grande ver a la familia, siempre me he llevado muy bien con la parte de mi madre. Pero es que a mi tío de Toledo no le soporto… a todo el mundo le cae bien porque va de gracioso, pero es que yo no le encuentro la gracia por ninguna parte. Va de listo y además es algo borracho y a mi me saca de quicio.

Todos me rayaban para que me quedase a dormir pero yo paso, necesito mi ordenador, mi casa, mi música… esas cosas que hacen que mi tiempo sea menos agobiante.

Esta tarde ya he quedado con Sugui para ir al cine a ver “Bandidas” (nosotras elegimos las películas por las actrices, no por el argumento. Como cuando vimos “La casa del lago”).
Y por la noche me iré de petardeo con A. así que espero que a tarde de hoy y la mañana de mañana pasen rapidito… Y el sábado ya habrá vuelto de la s vacaciones la niña de ojos azules.
Ya se que estoy mas sensiblona de lo normal, pero es que la echo mucho de menos. Si me deja, cuando la vea le daré un abrazo hasta que le rompa las costillas :P

La sorpresa del día fue cuando ayer me despierta el timbre de la puerta. En una situación normal ni pienso en levantarme porque yo nunca espero a nadie, pero un sexto sentido me dice que vaya a abrir porque vale la pena.
Me visto con lo primero que pillo (no es cuestión de abrir en bragas) y con mis desastrosos pelos me dispongo a abrir al cartero (sabia que seria él, soy así de lista).
Me entrega un paquete que no cabe en mi buzón y yo, presa de la impaciencia que me caracteriza, no espero ni 2 segundos a abrirlo.

Y me encuentro con un libro titulado “Rumbo a Japón”, y una nota escrita a mano que me dice que ahora ya tengo un entretenimiento para estos 15 días…